Pintura, escultura, instalación... son varias las disciplinas artísticas que requieren una documentación fotográfica destinada no solo a la difusión de trabajos o proyectos en Internet (redes sociales, web, etc.) sino también a la publicación de catálogos y folletos en exposiciones, revistas especializadas y otros medios.  

La técnica fotográfica empleada en la reproducción de obras de arte es posiblemente una de las complejas de ejecutar debido a la minuciosidad, precisión y fidelidad con la que hay que reproducir las obras. El artista conoce perfectamente su obra y todo el proceso de creación en el que se ha visto sumergido hasta obtener el resultado deseado. Esto es una ventaja, porque tiene una idea extremadamente clara de lo que quiere obtener en la reproducción, pero para el fotógrafo se convierte en un desafío mayúsculo, en especial con algunas disciplinas en las que hay inevitables conflictos entre los distintos medios de elaboración de la imagen y sus correspondientes sistemas de representación, y debe saber resolverlos.

Son estos motivos los que obligan al fotógrafo a estudiar tanto la obra de arte como todas las particularidades del proceso creativo de la misma. Es entonces cuando se deben poner en práctica las técnicas fotográficas específicas de Bellas Artes para reproducción de obras.

Pintura de portada: Traver Calzada